¿Estamos nosotros buscando los puestos de mayor importancia, poder, y reconocimiento? ¿Qué dice Jesús de esas ideas y esos pensamientos tan naturales y comunes? Jesús es nuestro ejemplo perfecto, porque él “no vino para ser servido, sino para servir.”
En nuestras iglesias creemos que es nuestro deber ofrecer consejo y apoyo a los miembros que se hallan en dificultades económicas. Se les pide a los diáconos o a otras personas que sirvan de consejeros o fiduciarios. Ayudar a un hermano o a una familia de esta manera es un acto de servicio.
Sed hijos obedientes
¿Cómo se manifiesta nuestro amor para Dios?
Todavía no se ha perfeccionado el amor en nosotros a quienes Dios ha amado. Con el amor espresamos la realidad de que somos Sus hijos. Así seremos reconocidos. ¿Porqué nos cuesta amar? ¿Cómo son las relaciones cuando hay amor?
Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo. Filipenses 2:3
La preparación del mensaje