¿Por qué las personas que se llaman cristianas, ignoran, o rechazan muchos consejos escritos en la Palabra de Dios, a pesar de que creen en la última comisión de llevar el evangelio por todo el mundo? La frase, “enseñándoles que guarden todas las cosas” es de igual importancia que el mandato "id".
El discípulo de Cristo anda unido en un yugo con El, obedeciendo Sus órdenes como su Señor. El mundano no se preocupa con tales cosas, haciendo lo que más le plazca. ¿Cómo será posible unirse en negocios el cristiano con el mundano cuando tienen los objectivos tan opuestos?