El hombre que toma bebida alcohólica y se emborracha es un espectáculo triste con que encontrar. Indubitablemente sufre por sus propios decisiones y escogeres. Pero, ¿será que él soló lleva la culpa por su embriaguez?
En los días antiguos, tenían la costumbre cruel de sacrificar al ídolo Moloc niños inocentes. ¡Que horrible! ¡Nunca tal haríamos nosotros! Pero—detente un momento, y considera el desafío del autor.