El hombre que toma bebida alcohólica y se emborracha es un espectáculo triste con que encontrar. Indubitablemente sufre por sus propios decisiones y escogeres. Pero, ¿será que él soló lleva la culpa por su embriaguez?
La adolescencia es una etapa de la vida muy importante en la cual la persona toma muchas decisiones que forman sus convicciones y su carácter. Durante esa etapa el joven pasa el proceso de maduración; cambia de un niño que depende intelectual y espiritualmente de sus padres a un adulto.
Dios no ha olvidado hablar de las necesidades de los adultos solteros en su orden de autoridad, aunque quizás nosotros sí lo hayamos hecho.
El esposo cristiano está llamado a ser un hombre como Cristo. Habiendo recibido la naturaleza de Cristo en el nuevo nacimiento, debe amar a su esposa como Cristo ama a la iglesia. Se entrega a su esposa como Cristo se dio a sí mismo por la iglesia.
En los días antiguos, tenían la costumbre cruel de sacrificar al ídolo Moloc niños inocentes. ¡Que horrible! ¡Nunca tal haríamos nosotros! Pero—detente un momento, y considera el desafío del autor.
Si alguno ha fallado a la hora de criar hijos cristianos, obedientes y respetuosos, aún hay esperanza. No solo a Elías se le encomendó el ministerio de hacer volver el corazón de los padres a sus hijos y el corazón de los desobedientes a la sabiduría y justicia.
¡PARA ESCUELITA DE VERANO! Estas lecciones son diseñadas para su uso en ministerios donde los niños tienen poco o ningún conocimiento de Dios y la Biblia. Las hojas de ejercicios proveen oportunidades para enseñar e interactuar con los niños mientras se les alumbra con la luz de Dios.
Hablemos de la tecnología ofrece principios bíblicos, orientación práctica y una guía de estudio en grupo para ayudar a los jóvenes a tomar decisiones difíciles en una sociedad delicada; decisiones que les permiten salir adelante en un mundo digital engañoso.
Hoy día hay mucha necesidad de adopciones. Hay tantos niños en el mundo que no tienen hogar. El corazón de cada padre cristiano debe sentir compasión por ellos, como Dios se compadece de las almas perdidas que él desea adoptar.